Con doble motivación

Jonathan Herrera espera seguir el ejemplo de Marco Scutaro en los Rockies y aseguró que su fallecida madre será su inspiración este año.

Jonathan Herrera vivió el invierno más duro de su vida el año pasado. Una penosa enfermedad lo hizo sufrir la pérdida irreparable de su madre, Dainys, en noviembre de 2011, en una batalla que tuvo por mucho tiempo y que mantuvo al infielder fuera de los terrenos de juego en Venezuela por primera vez en su carrera.
“A veces te suceden cosas que nadie desearía que te pasen”, reflexionó el zuliano, vía telefónica desde Arizona, donde ya entrena con los Rockies de Colorado. “Vengo con un poco más de enfoque, de ganas de seguir trabajando duro por conseguir todas esas metas que me tracé, porque ese es el anhelo personal y el anhelo de la familia, de mi mamá, que como muchas personas saben falleció, pero va a ser una inspiración para mí este año”.

El marabino, de 27 años, está llamado a ser el utility de los Rockies, club con el que vivió un buen arranque en la campaña 2011 (bateó .287 hasta el 19 de mayo), pero terminó con un bajo promedio ofensivo de .242 en 104 compromisos.
“No tuve un rendimiento del otro mundo, pero jugué buena defensa”, esgrimió Herrera, quien confesó que sus problemas familiares no son excusa para su rendimiento. “Pero sí hubo esos momentos que influyen, que hacen desenfocarte un poco. Es algo difícil de manejar, de controlar y mucho más durante la temporada, que debes estar 100% concentrado y enfocado”.
Y con la mente puesta en honrar la memoria de su madre, Herrera llegó motivado al Spring Training en Scottsdale, donde volverá a compartir, por tercer año consecutivo, con un venezolano en el cuadro: Marco Scutaro.
“El año pasado (llevaron) a Celestino López, el antepasado a Melvin Mora... Siempre he tenido a una persona ahí, un jugador de experiencia, como Marco”, recordó. “Para muchas personas eso es un obstáculo para ser un jugador diario, pero para mí no. Gracias a Dios, siempre he tenido la oportunidad de jugar, de defender un poquito en segunda, un poquito en el short”.

“La llegada de Scutaro me llena mucho, porque nos brinda bastante profundidad en el medio”, acotó. “Un pelotero de ese calibre, como Marco, con experiencia de Grandes Ligas, a la misma vez me ayuda a mí también, con sus consejos. Su experiencia me va a servir de mucho”.
Y Scutaro también será un espejo para el zuliano, quien aspira a ser titular en las mayores. El yaracuyano, de 36 años, estuvo de utility en las mayores durante seis años, hasta que los Azulejos de Toronto le dieron la oportunidad en 2008.
“Ése es tremendo ejemplo, él (Scutaro) empezó así su carrera también, como utility, hasta que finalmente se le presentó la oportunidad y ahora es un jugador de todos los días”, dijo. “Todo llega en su debido momento. Sé que tarde o temprano voy a tener la oportunidad, bien sea aquí o en otro equipo”.