“No siento que perdí”

Alex Torres relató su debut en las Grandes Ligas. Espera regresar pronto a las mayores y aspira a jugar con Águilas del Zulia.

Alex Torres cumplió su sueño de jugar en Grandes Ligas, el pasado lunes, y lo hizo ante la poderosa toletería de los Yankees de Nueva York. Fue un estreno agridulce: compartió batería con otro criollo debutante, Robinson Chirinos, pero cargó con el revés.
A pesar de la derrota, el zurdo de las Rayas de Tampa Bay está satisfecho. Logró una meta y, luego de ser bajado a Triple A un día después, está seguro que pronto tendrá su revancha.
“Estoy bastante contento, bastante feliz y bastante agradecido por esa gran oportunidad que me brindó el equipo de Tampa Bay, y muy contento por ser parte de esa lista de venezolanos en las Grandes Ligas (el 265)”, dijo a PANORAMA, vía telefónica desde Estados Unidos. “No siento que perdí, sino que fue una experiencia más de mi carrera. Espero que me den una oportunidad más adelante, que espero que sea pronto, y a seguir trabajando”.
El lanzador debutó en la parte alta de la novena entrada, con el juego empatado 4-4, para enfrentar a Curtis Granderson, Mark Teixeira y Robinson Canó.

Granderson lo recibió con sencillo al centro, pero el carabobeño sacó su primer out con un ponche a Teixeira. Con Canó al bate, el corredor se estafó la intermedia y avanzó a tercera con un rolling del dominicano al camarero.
Con dos outs y la carrera de la diferencia en tercera, el mánager Joe Maddon le pidió al novato que le diera boleto intencional a Nick Swisher, una decisión polémica que pudo cambiar la suerte del criollo.
“Ellos (los técnicos) tienen un poco más de conocimiento de los bateadores, ya que tienen mucho tiempo en Grandes Ligas y yo me estaba dejando llevar por las órdenes que me daban”, explicó. “Si hubiese tenido un poco más de experiencia o un poquito más de potestad, quizás a lo mejor le digo, ‘vamos a pitchearle así’… Pero son órdenes que vienen del mánager y hay que acatarlas”.
“Yo quería pitchearle a Swisher, pero cuando salió (Maddon) a hablar conmigo me dijo que él le bateaba muy bien a los zurdos y que atrás venía Andruw Jones”, agregó. “Me dijo, ‘no es el mismo curazoleño de hace 10 años, vamos a caerle a piedras. Era la lógica, lo ameritaba la situación y lamentablemente no salieron bien las cosas”.

A Jones lo perdió en cinco pitcheos, al igual que a Russell Martin, quien forzó la carrera de la diferencia tras llegar a cuenta de tres bolas y dos strikes.
“Obviamente, como cualquier otro pitcher, me molesta una carrera forzada por una base por bolas”, indicó. “Y más en esa situación de juego, en la que no se puede permitir una carrera de esa forma, pero traté de agarrarlo con la mayor serenidad y pude sacar el último out al dominar a (Brett) Gardner (rolling a tercera)”.
Torres aseguró que haber salido en una situación de relevo, algo atípico para él, no lo afectó, así como tampoco los nervios.
“Sinceramente me sentí un poquito presionado cuando estaba en el bullpen. Cuando sonaba el teléfono en el bullpen, quería ser yo al que pitching coach pusiera a calentar el brazo”, apuntó. “Cuando me tocó a mí, que me dijeron que tenía que calentar para ponerme listo para entrar al juego, ahí me puse bastante cómodo, bastante relajado, y de verdad que cuando entré al juego no me valió a qué equipo o bateador me estaba enfrentando. Solamente estaba enfocado en la mascota y en las señas que me daba Chirinos, más nada”.

El valenciano, de 22 años, manifestó su orgullo al hacer historia junto con Chirinos, quien se estrenó en ese mismo encuentro, convirtiéndose en la primera batería criolla que debuta en el mismo juego y en la primera pareja de venezolanos que hace el grado el mismo día y con el mismo uniforme.
“Al principio no lo sabía, pero estoy muy emocionado y muy contento de haber hecho historia y de tal manera”, subrayó. “Eso me agrada mucho, ya que entramos en los libros Robinson y yo”.

Disposición
Alex Torres apuntó que desea jugar con Águilas del Zulia en la venidera campaña de la Lvbp, así sea con las mismas restricciones. “Siempre y cuando esté saludable y mi brazo se sienta bien para competir, estaré a disposición. Solamente les pido (a Tampa Bay) que me vuelvan a dar el permiso, así como el año pasado, que con eso voy a poder ayudar al equipo y me va a permitir a mí a seguir aprendiendo”.