El debate quedó cerrado. No hubo sabermetría alguna que evitara un nuevo encuentro entre Miguel Cabrera y la historia.
El aragüeño se convirtió, anoche, en el primer venezolano en ganar un premio al Jugador Más Valioso en la ronda regular de las Grandes Ligas, luego de obtener el de la Liga Americana con una ventaja considerable sobre el novato sensación Mike Trout: 362 puntos sobre 281.
“Te soy sincero, estaba un poquito ansioso, nervioso de la noticia, pero estaba tranquilo, porque el trabajo de uno ya estaba hecho”, contó el flamante MVP, vía telefónica desde Miami. “Conozco bien el sistema, cómo se maneja ese tipo de votaciones. Cualquiera de los dos que ganara iba a ser bien merecido y bueno, corrí con la suerte que votaron más a mi favor”.
El slugger de los Tigres de Detroit hizo valer el peso de su Triple Corona, la primera en las mayores en 45 años, para llevarse el favoritismo de los votantes, quienes le dieron 22 sufragios al primer lugar y seis al segundo.
Trout, Novato del Año unánime y gran rival del antesalista, recibió seis votos al primer lugar, 21 al segundo y uno al tercero.
“No me esperaba eso”, agregó sobre su ventaja de 81 puntos. “Como todos los cronistas estaban dando de favorito a Mike Trout, por toda esa nueva manera de sacar los números, por computadora y todo eso, pensaba que la competencia iba a estar cerrada, pero que al final iba a ganar él”.
No fue así. Esta vez la decisión estuvo a su favor y celebró en familia al escuchar su nombre a través de la transmisión de MLB Netwoork.
“Abracé a mis hijos, abracé a mi esposa. Fue un momento muy especial para nosotros”, contó. “Estábamos aquí en la sala viendo y fue algo inolvidable”.
El venezolano lideró a los bengalíes al banderín de la División Central del joven circuito, amparado en su .330 de promedio, 44 cuadrangulares y 139 remolcadas, cifras topes en todas las Grandes Ligas.
De las 17 Triple Coronas conseguidas en las mayores, solo siete veces coincidió con un MVP, siendo esta la cuarta de manera consecutiva, después de las obtenidas por Mickey Mantle (1956), Frank Robinson (1966) y Carl Yastrzemski (1967).
El criollo, además, fue líder en slugging, con .606, y porcentaje de embasado más slugging, con .999.
“Pienso que esta temporada la voy a recordar toda mi vida, para contársela a mis hijos, para enseñarles todo lo que se hizo este año”, señaló. “En realidad es una temporada inolvidable”.
Cabrera describió la campaña de 2012 como “casi perfecta”. Solo le faltó el anillo de Serie Mundial que le arrebataron a los Tigres los Gigantes de San Francisco en cuatro juegos.
“Con esa Serie Mundial hubiera sido buenísimo, pero así es el béisbol”, destacó. “Pienso que fue un punto negativo de lo que se puede analizar de todo esto. Hay que trabajar un poquito más el año que viene y tratar de ganar eso colectivo que nos faltó este año”.
El criollo ya está pensando en saldar esa deuda la campaña que viene.
“Tuvimos otra adquisición muy importante, que fue la de Torii Hunter, y la llegada de Víctor (Martínez) sano esperamos que nos puedan ayudar y cumplir ese sueño que queremos, que es ganar esa Serie Mundial en Detroit”.
Pero antes espera celebrar en Venezuela su MVP, empezando por Maracaibo, donde recibirá el domingo el premio Luis Aparicio.
“Nos vemos el sábado por allá, si Dios quiere, compartiendo y celebrando este premio juntos. Este premio no es solo mío, sino de todos ustedes también y es algo bien especial”, subrayó. “Estoy loco por llegar a mi tierra, a celebrar, tratar de compartir con ellos (los aficionados), tratar de disfrutar este premio junto con ellos, porque en realidad se lo merecen también”.
“Este gran premio no es solamente para mí, sino para todo el país venezolano”, añadió. “Este es un premio dedicado a todos ellos, a toda mi familia y (estoy) contentísimo de esto”.
“Esta es una gran noticia para Venezuela, esto es algo que estábamos esperando por muchos años, desde que Luis Aparicio y todos esos baluartes nos abrieron el paso a nosotros y pudimos conseguir esa meta”, afirmó Cabrera, quien coronó una campaña de ensueño para el país, que incluyó un Guante de Oro, un Bate de Plata, un juego sin hits, un juego perfecto y dos premios al Más Valioso en la postemporada.
“Esperemos que otro venezolano se gane el MVP, que otro venezolano se gane el Cy Young y que sigan los triunfos así”, dijo. “Guante de Oro, Bate de Plata, tenemos todo. Venezuela está llegando a ser una de las potencias del béisbol y ese es el trabajo, tratar de seguir mejorando y tratar de que sigan venezolanos saltando a la Gran Carpa y que sobresalgan así como sobresalen todos los venezolanos en este momento”.
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