Los rapaces niegan que la lesión de Freddy Galvis en la espalda se haya producido en la Lvbp. “Es una falta de respeto, porque somos responsables”, afirmó Ruperto Machado, gerente del Zulia.
A la gerencia de Águilas del Zulia no le sentó bien las declaraciones del alto mando de los Filis de Filadelfia tras la lesión en la espalda del infielder Freddy Galvis.
Scott Proefrock, asistente a la gerencia general de los Filis, señaló la semana pasada a la prensa de Filadelfia que la molestia de venezolano pudo haberse originado durante la pelota invernal, lo que dio pie a la fractura del pars en la vértebra L45 que lo mantendrá inmóvil con un soporte diseñado para su espalda por las próximas tres semanas.
“Me parece una falta de respeto esas declaraciones, porque nosotros somos responsables y no tenemos por qué estar escondiendo nada”, señaló Ruperto Machado Ascanio, gerente general de los rapaces. “El gerente general (de los Filis, Rubén Amaro Jr.) sabe que está hablando con personas serias y está asumiendo que escondimos una lesión, cosa que no es cierta”.
Machado recordó un episodio durante la pasada temporada de la Lvbp en el que Galvis presentó un problema físico en un antebrazo, que lo sacó de acción durante varios días.
“Antes de proceder a hacer cualquier tratamiento, hablamos con la gente de los Filis. Nuestro doctor les explicó lo que pasaba, lo que podíamos hacer y ellos lo autorizaron”, contó el ejecutivo zuliano. “Eso demuestra que ante todo mantenemos al tanto a las organizaciones sobre la salud de sus peloteros. No los ponemos en riesgo”.
Maglanier Penzo, trainer de Águilas, aseguró que en ningún momento Galvis presentó molestias en su espalda durante su participación en Venezuela.
“No, nunca tuvo problemas en la espalda”, afirmó Penzo.
Machado señaló que están estudiando presentar una queja formal ante los Filis por las declaraciones de Proefrock, que podrían afectarlos en sus relaciones con las diferentes organizaciones de las Grandes Ligas. Además, se mostró sorprendido, debido a que Rubén Amaro Mora, padre del directivo de los Filis, siempre ha estado de por medio en las relaciones como gerente rapaz.
“Creo que hay la suficiente confianza y respeto entre ambas organizaciones como para que den esas declaraciones”, destacó Machado. “Hacen ver que no hemos sido honestos. Eso nos desilusiona”.
La actual fractura de Galvis en la parte baja de la espalda pone en riesgo la continuidad de su temporada de novato como camarero de los Filis, aunque Scott Sheridan, trainer de los cuáqueros, da esperanzas de un retorno al campo.
“Después (de tres semanas) lo vamos a reevaluar y ver dónde estamos”, contó Sheridan al portal oficial de los Filis. “Basado en los síntomas de ese tipo de cosas, quizás podamos empezar algún tipo de ejercicio, pero realmente no sabremos más hasta que no pase este periodo de tiempo. Lo más importante es hacerlo sentir cómodo, hacerlo sentir mejor y tratar de que esta cosa sane”.
Sheridan aseguró que el tiempo de reposo “depende de cómo responda en las primeras tres semanas” y afirmó que “no es una lesión poco común en el béisbol”.
“Quieres tratarla apropiadamente”, dijo. “Si dejas pasar esto, pueden progresar otros problemas”.
Galvis, entonces prospecto de la organización, recibió permiso para jugar en Venezuela hasta el 23 de diciembre del año pasado. A pesar de su actual condición, y de las restricciones presentadas por los Filis en la pasada campaña, Águilas del Zulia no quiere descartar por completo su presencia en el próximo torneo local.
“Ojalá lo tengamos, pero no queda de nuestra parte esa decisión”, puntualizó Machado. “Águilas del Zulia quiere que juegue, él le ha manifestado a la gerencia que quiere jugar. Obviamente no esperamos que lo haga desde el principio, pero ya eso lo veremos más adelante”.
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