Comienzan de cero

Águilas del Zulia le dio a su fanaticada el anhelado regalo de navidad: la clasificación. Pero eso ahora ya quedó atrás y ahora empezarán desde cero en el round robin, instancia en la que buscarán su boleto a la final de la Lvbp.

Atrás quedó el nefasto y sufrido último mes de ronda regular (6-11), la ausencia de Gerardo Parra, y el pobre desempeño de su bullpen. Ahora, reforzados, los dirigidos por Eduardo Pérez deben hacer borrón y cuenta nueva para soñar con ir a Margarita en febrero.

Por supuesto, éso no será fácil. Primero, sus rivales lucen blindados, sobre todo Caracas y Magallanes, aparte que ahora su cuerpo de abridores no luce tan temible, a pesar de las incorporaciones de Jim Brower (3-1, 2.41 EFE) y José Santiago (3-1, 3.71). La partida de Josh Schmidt (2-5, 3.58) es un duro golpe, así su récord diga lo contrario. El derecho fue un "caballo" y no tuvo mejores números gracias a su defensiva y a su bullpen.

Por ahora Pérez irá con una rotación encabezada por Heath Totten. Brower y Santiago le seguirán, pero una rotación de tres podría ser contraproducente para la parte final del calendario, por lo que se espera que traigan otro brazo del Caribe para llenar ese hueco.

De los importados sólo quedan Totten, Kenny Pérez, Sandy L'Real y Chris Hernández. Andrew Locke, Wilton Chávez y Dwayne Pollok fueron sustituidos junto con Schmidt, quien alegó cansancio para marcharse. El cupo de David Austen sigue vacante, aunque hubiese sido mejor dejarlo mientras consiguen una mejor opción para no forzar su rotación.

Para el bullpen luce adecuada la inclusión de Rómulo Sánchez (6-4, 3.82), quien será el set up de Hernández y el principal brazo de Pérez para las situaciones de apremio junto con Yeiper Castillo y Erick Arteaga.

A la ofensiva la única adición es la de Alex Romero (.345, 22 CA, 13 2B,14 CI). Quizás fue la mejor selección de todas para los rapaces. ¿Por qué? Podrá cubrir la vacante de Parra, es zuliano, siempre ha querido jugar con Águilas y sabe ganar. Le pueden preguntar eso a la afición de los Tigres de Aragua.

La clave para los zulianos será jugar como en el juego extra ante Cardenales: con buen trabajo de sus abridores, gran relevo, sólida defensa y conectando el batazo oportuno. Así podrán pensar en el sexto título y en la mejor celebración para sus 40 años.